Si bien la carrera de Cesc Fàbregas ha ido en baja en los últimos años, su calidad como futbolista sigue intacta. Actualmente en Mónaco, el español dialogó con Súper Deportivo Radio, programa de Radio Villa Trinidad, y se refirió a sus deseos y hasta habló de su amistad con Lionel Messi.
El campeón del mundo con España en Sudáfrica 2010 reveló su deseo de disputar la Copa Libertadores: “Es un torneo muy potente en todo el mundo. En España y en Inglaterra se habla mucho de la final de la Copa Libertadores cuando se juega”. Pero, ¿jugaría en el fútbol argentino? No lo descartó: “Nunca lo había pensado, esto va muy rápido y no tienes tiempo de pensar en ciertas cosas pero, ¿por qué no?La verdad que me parece una liga muy competitiva, muy agresiva, hay jugadores con muchísimo talento, han salido grandísimos jugadores de Argentina y del continente en general. La verdad que sería para mí un placer ir a jugar ahí”.
Como a todos los futbolistas de nivel internacional, se le realizó una consulta súper clásica. “No voy a escoger entre River y Boca. La pasión que tienen los dos es increíble. Fui a ver la final a Madrid y me encantó. Las dos aficiones fueron increíbles. Entrenamos también con la Selección española en la Bombonera y me encantó, jugamos en el campo de River contra Argentina y la verdad que fue increíble. No voy a optar ni por uno ni por otro, fueron dos experiencias increíbles”.
El ex Barcelona, Chelsea y Arsenal se refirió a su íntima amistad con Leo. Las familias se van de vacaciones juntas y sus esposas tienen una estrecha relación. “Cuando llegó tenía 12 años, vino a prueba y se sentó a mi lado en el vestuario. Era tímido, no conocía a nadie. Después lo vi en muchos estados. Contento, enfadado, triste… Es un competidor, un ganador nato. No se puede ser ganador y no enojarse. Él siempre fue un líder y me gusta este nuevo perfil, como veterano en la Selección”.
Para cerrar, Fábregas contó una anécdota que demuestra el espíritu del 10: “En un partido de la Copa Cataluña donde él se rompió el pómulo una semana antes de jugar la final, Tito Vilanova, nuestro entrenador en el equipo cadete, decidió ponerlo. Me acuerdo que decidió poner a Leo de falso 9, una posición en la que él no jugaba y fue porque en la banda le hacían muchas faltas, tenía que conducir más, driblaba y tenía que conducir mucho, entonces de 9, el entrenador pensó que era una buena posición, por su pómulo roto. Bueno, Leo en 20 minutos, metió 3 goles y el entrenador lo cambió para no arriesgar. Me acordaré siempre, je”.
¡Mirá las fotos de Fábregas cuando visitó la Bombonera y el Monumental!