Se habla poco de fútbol en la serie entre Boca y Vélez, en la que el Xeneize pasó a semifinales tras igualar 0 a 0 ambos duelos y ganar 5-4 en los penales. Es que el foco se puso en Mauro Zárate por varios motivos.
Primero, por su regreso al José Amalfitani, donde fue insultado hasta en el momento en el que sonaba el himno. Luego, por cómo gritó su gol tras rematar desde los 12 pasos y, finalmente, por las picantes declaraciones post partido: “Pasó el equipo grande“.
Por eso, en 90 minutos por Fox Sports, Oscar Ruggeri se refirió a este tema y no titubeó: “Estoy bastante de acuerdo con él. Nadie sabe lo que se vive internamente cuando decidís irte de un club a otro. Nadie sabe lo que vive la familia, las amenazas que recibís, en la calle… En frío, todos dicen que ‘cómo va a decir eso’, pero se desahogó de todo lo que pasó. Es un pibe, es un buen chico”.
Claro que su experiencia como futbolista lo avala a opinar al respecto, pero sobre todo encuentra sustento en lo mal que la pasó el Cabezón cuando se fue de Boca para jugar en River: “Me pasó a mí también, pero yo no tenía esta posibilidad de hablar, pocos nos hacían notas. Pero es así, no sabés la carga interna que tenés. A Nancy la fueron a buscar, la seguían al jardín… Era el Abuelo (NdR: líder de La 12 en la década del 80). Cuando hacés el gol, se lo gritás y te desahogás. Y si puedo, los puteo y los recontra puteo. ¿Ojo por ojo? Me prendieron fuego la casa, con mi mamá, mi papá y mi abuela adentro. No podían salir y tuvieron que ir los vecinos a apagar la casa. Si yo juego el partido y gano… ¿me voy a ir así, cabizbajo? Pero los mando a la recon… de su madre“.
¡No te pierdas el fuerte relato de Ruggeri y cómo bancó a Zárate!