Amalia Granata levantó un importante revuelo en Chile al poner en entredicho la virilidad del tenista Marcelo Ríos, con quien mantuvo un romance de 48 horas y que hoy recordó la prensa chilena a 10 años de ocurrido.
Según la prensa trasandina, como Amalia debió soportar el rechazo público del deportista, le llegó el turno de la venganza y se despachó contra el deportista insinuando que el tenista no cumplió sus expectativas.
“Es muy halagador, muy encantador, pero a la hora que una quiere ser feliz, no pasa nada” dijo, a la vez que realizaba un gesto técnico para aclarar sus dichos: A poca distancia juntó sus dedos índice y pulgar de la mano izquierda, frunciendo el ceño en señal de desaprobación.
“No se lo recomiendo a ninguna mujer”, dijo en tono duro, agregando que “las rubias le gustan, pero no pasa nada”, reiteró tratando de parecer ofendida. “Puro bla, bla, bla y a hora de… nada”, replicó.
Granata intentó explicar su percepción del asunto, señalando que “a lo mejor no le gustan las mujeres, no sé”, calificando su encuentro con Ríos como “un bochorno”.