El pasado 5 de mayo, Adele cumplió 32 años y causó furor en las redes sociales: es que sorprendió con su aspecto, a través del cual se vio una transformación física con un marcado descenso de peso y los usuarios encendieron la polémica. Enseguida se conoció qué dieta llevó a cabo para eliminar alrededor de 50 kilos.
Para defenderla de las críticas y eliminar rumores de problemas alimenticios o de algún trastorno, Pete Geracimo alzó la voz. O bueno, al menos alzó las palabras. Es que el entrenador personal de la artista publicó en su cuenta de Instagram una carta en la que explicó de qué se trató el cambio de la británica. El especialista detalló cómo fue la evolución de la cantante y además aclaró que no se trata del aspecto, sino de la salud.
“Como entrenador personal de Adele en Londres, es desalentador leer comentarios negativos y acusaciones de gordofobia que cuestionan la autenticidad de su increíble pérdida de peso. En mi experiencia personal de trabajar con ella a través de muchos altibajos, ella siempre fue al ritmo de su propio tambor, en sus propios términos. Ella nunca socava su talento dado por Dios de ninguna manera. ¡Dejó que su increíble voz hablara, o debería decir cantar! Nunca fingió ser algo que no era. Lo que vieron era lo que había. ¡Y a todos nos ENCANTÓ! Cuando Adele y yo comenzamos nuestro viaje juntos, nunca se trató de ponerse súper delgada. Se trataba de hacerla sana. Especialmente después del embarazo y después de la cirugía. Cuando cayó el 25 y se anunció la gira, tuvimos que prepararnos para un agotador programa de 13 meses. En ese tiempo, ella comenzó a entrenarse y tomó mejores decisiones alimenticias. Como resultado, perdió peso considerable y la gente se dio cuenta. La transformación de su cuerpo fue salpicada en todos los medios de comunicación. La atención que generó fue alucinante. Desde que se mudó a Los Ángeles, ha sido bien documentado que sufrió algunos cambios personales difíciles. Es natural que con el cambio surja una nueva sensación de ser y de querer ser tu mejor versión posible. ¡Ella adoptó mejores hábitos alimenticios y se comprometió con su estado físico y ‘está sudando’! ¡No podría estar más orgullosa o más feliz por ella! Esta metamorfosis no es para la venta de álbumes, publicidad o para ser un modelo a seguir. Lo está haciendo por sí misma y por Angelo. Espero que la gente aprecie el arduo trabajo que Adele ha hecho para mejorar a sí misma en beneficio de ella y su familia solamente. Ella no perdió el peso para hacer que los demás se sintieran mal consigo mismos. Esta transformación personal no tiene nada que ver conmigo o contigo. Se trata de Adele y de cómo quiere vivir su vida. Ella no ha cambiado de la Adele con la que crecimos y amamos. Solo hay un poco menos de ella para todos”.
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