Como todos los años, el programa Los Ángeles de la Mañana sufrió un cambio en su panel y la polémica en torno a la silla abandonada no tardó en llegar. Esta vez fue Graciela Alfano quien se despidió del ciclo emitido por la pantalla de El Trece.
Si bien parecía que todo había concluido en buenos términos, ya que el reemplazo de la exvedette estaba previsto por contrato, la “angelita” decidió disparar un par de dardos antes de dejar su lugar a Cinthia Fernández.
Es que en diálogo con Intrusos la modelo no dudó en criticar al conductor del magazine por su manera de llevar el programa. “Ángel me cerraba el micrófono. Tiene una cosa que yo detesto y ya se lo dije, es una censura. Yo no sé si es una falla como conductor o si le gusta”, disparó al referirse a la costumbre del periodista de evitar que sus panelistas se pisen o se interrumpan al hablar pidiendo que corten los micrófonos.
“Es un estilo espantoso de censurar, a mí no me gusta, lo repudio. A mí no me divierte y no es parte del juego. Yo no acepté nada, a mí nadie me lo planteó. Cuando me cortó el micrófono, me paré como una loca y me fui a hablar con mi representante atrás de cámara”, comentó al respecto.
Más tarde, la mujer aclaró que este acto podía ser dejado de lado: “Se puede admitir si es un chiste, porque si no es una misoginia y una censura. Yo estaba haciendo una devolución a alguien que me estaba agrediendo. Era parte del show y podía rendir muchísimo, y Ángel me corta el micrófono en defensa de la persona que me agredía. Es misógino, se lo dije en la cara veinte veces”.
“Querido Angelito, ya te lo dije, mañana contestame lo que quieras porque a mí no me entran las balas”, concluyó Alfano buscando guerra con el periodista de espectáculos.