Jennette McCurdy, ex protagonista de la serie televisiva Icarli, publicó recientemente un libro en el que habla del horror que vivió al ser una estrella infantil. El mismo, se escribió bajo el nombre “I’m glad my mom died”, cuya traducción al español es “Me alegro que mi madre haya muerto”, acompañado de una portada donde se ve a la actriz posando con las cenizas de quien, presuntamente, sería su progenitora.
El título de la publicación no tardó en generar polémica e, incluso, rechazo. Lo que muchos no sabían es que McCurdy se atreve a confesar en el mismo la serie de situaciones de violencia que vivió cuando era una menor de edad.
En su relato, la actriz denuncia a su madre por obligarla a trabajar en el mundo de la pantalla chica; controlar de manera excesiva su peso ,y por situaciones de abuso sexual que vivió. Según la actriz, la mujer la bañaba junto a su hermano de casi 16 años, por lo que el baño, para ella se convirtió en “un ritual terrible”: en las páginas contó que su mamá la examinaba para verificar que no tuviera “bultos” en el busto y la vagina porque podría tratarse de cáncer.
La ex actriz, conocida por participar en “iCarly” como “Sam Pucket” para la famosa producción juvenil de Nickelodeon, también dedicó parte del libro a las vivencias con la productora: Jennette contó que la empresa le intentó pagar 300 mil dólares para no contar sobre el abuso que sufrió.
McCurdy rechazó el dinero y recibió duras críticas por parte de su equipo, “Esto no es dinero gratis. Esto se siente como dinero para callarme, no tomaré dinero para callarme”, declaró en una entrevista. En el presente de la ex estrella infantil está muy lejos de la actuación, Jennette se dedica a la escritura y a la producción y conducción de un podcast llamado “Empty Inside”.