“Fue un shock, no me lo esperaba. Fui a su casa porque me invitó, acordamos. Había química, nos besamos y estaba todo bien pero sucedió algo que no me esperaba. Me pidió una práctica sexual, me negué, se enojó, se puso agresivo, me insultó y hubo penetración no consentida. Yo me puse mal, me quería ir, pero él me maltrató (…). Sé que sólo él y yo sabemos lo que pasó”, denunció Érika Basile el año pasado sobre un episodio que habría ocurrido con Pablo Rago en 2015.
Asimismo, la mujer expuso los tremendos efectos de esa situación: “Él estaba fumando marihuana. Después me fui y no lo vi más, pero él me mandaba videos (íntimos). No lo bloqueé porque había quedado pendiente un tema de trabajo que yo seguía esperando, pero nunca me respondió por eso. Me gustaría que salga a hablar y niegue lo que digo”, reclamó y agregó: “Necesito superar esto porque me arruinó la vida”.
Tras sus declaraciones, se realizó una pericia psicológica para determinar si existía un trauma derivado del episodio denunciado. La medida de prueba fue ordenada por el Juzgado Criminal y Correccional 54, a cargo de Walter Candela.
Luego de esas declaraciones, la Justicia ordenó que el Cuerpo Médico Forense realizara una pericia psicológica de la actriz para determinar los daños del hecho denunciado. Finalmente, hace pocas horas se dieron a conocer los resultados de la medida de prueba.
“Las pericias psicológicas determinaron que la denuncia de @ErikaBasile6 contra @PabloRago72 por violacion era mentira: “No tiene daño psicológico compatible con abuso sexual o violencia. Ni hay indicadores de abuso sexual o violencia de género””, escribió Ángel de Brito en su red social compartiendo lo que determinó el informe.