Ricardo Darín pasó cinco meses de su cuarentena conviviendo en Buenos Aires con su hijo el Chino, Flor, Úrsula Corberó y los perros: “Fue una experiencia maravillosa, la piloteamos muy bien”, relató.
Sin embargo, su hijo tuvo que irse por trabajo a España y el actor se encuentra preocupado por la situación del coronavirus: “Nos hemos cuidado mucho, yo no tengo miedo a contagiarme, pero mis alarmas están mucho más prendidas con el Chino, mi hijo que está en España, donde hubo un rebrote, y tengo preocupación por mi hija que por su trabajo está en contacto con mucha gente”.
A su vez manifestó que su hijo puede hacerse cargo: “También ellos son adultos responsables y están cuidándose”.
El director de cine también habló sobre el aislamiento y sus alteraciones psicológicas: “La soledad bien entendida y en buenos términos puede ser una situación agradable y reflexiva, pero en otros casos puede ser una encerrona, es decir, puede llevar a la depresión y la depresión es uno de los problemas más graves que tenemos en el mundo en este momento y del que se habla muy poco”.
Y detalló: “El bajar la guardia, el sentirte vencido… parte del sistema inmunológico se alimenta específicamente de nuestro estado de ánimo. De eso mucho no se habla porque ponemos por delante las cosas más urgentes, y vamos dejando para el lunes, metafóricamente, los otros aspectos, las otras consecuencias, los daños colaterales. Yo creo que en el corto, mediano y largo plazo, vamos a ver las consecuencias de los encierros, del aislamiento, la falta de cariño y de afecto”.