“Argentina está a un paso del colapso económico (de nuevo)”, afirma Forbes en el título de la nota.
El panorama económico del país sudamericano, profundiza la revista, “se puede explicar por su nivel de endeudamiento, que aumentó 20 puntos porcentuales del PIB entre 2017 y el segundo trimestre de 2018, alcanzando una deuda pública de 77,4% del PIB, de acuerdo con la Cepal (Comisión Económica para América Latina y el Caribe)”.
La revista subrayó el incremento de procedimientos preventivos de crisis que pidieron grandes empresas como Coca-Cola, Avianca o Carrefour.
Además, recordó que cada día cierran en promedio siete comercios, pues entre 2015 y 2017 clausuraron su negocio 3.190 empresas, según la Administración Federal de Ingresos Públicos.
“Los mercados internacionales solo financiaron hasta el primer año y medio a Argentina, debido al alto déficit que tiene”, comentó a Forbes el ex ministro de Economía, Ricardo López Murphy.
Esto sucede en un país que tiene “impuestos nórdicos y tiene servicios haitianos”, según López Murphy. El exfuncionario desarrolló su afirmación: “Cuando usted cobra impuestos muy altos y produce muy malos servicios genera una desventaja competitiva”.
El Fondo Monetario Internacional (FMI) firmó un acuerdo con el Gobierno de Mauricio Macri por valor de 57.100 millones de dólares en medio de una corrida cambiaria que hizo que la moneda local perdiera un 88,4% de su valor con respecto al dólar.
A cambio, el Ejecutivo se vio obligado a realizar un ajuste en la política económica, monetaria y fiscal que este año llevará a equilibrar el déficit fiscal primario (que no cuenta los intereses de deuda). El país sudamericano registró el año pasado un déficit fiscal primario equivalente al 2,4% del Producto Interno Bruto (PIB), tres décimas menos de lo pactado con el FMI.
El déficit financiero, que abarca el pago de deuda, llegó el año pasado hasta los 727.927 millones de pesos (18.956 millones de dólares), un 5,2% del PIB.
Por cumplir con las metas económicas pactadas con el organismo, el Ejecutivo argentino debe de recibir en marzo 10.800 millones de dólares del FMI, la mitad de lo asignado para este año.