Aunque es una de las últimas participantes que ingresó a Cuestión de Peso, Rocío ya lleva bajados más de 10 kilos desde que inició el tratamiento.
Para hacer frente al nuevo cuerpo que está teniendo, la joven hizo el ejercicio del espejo con Sergio Verón y habló sobre cuáles son sus ideales de peso: “Me gustaría tener el físico de Jimena Barón”.
“Empecé a comer porque estaba sola y comía chatarra todo el tiempo, era una manera de escaparme de todo lo feo que me pasaba”, contó la participante.