Parecía que Romina y Ramiro pegaban buena onda. Muchos se ilusionaron con un nuevo romance en La Suite. Pero todo terminó repentinamente, sin posibilidades para el amor… al menos por parte de Romina.
Y es que después de una serie de desencuentros y enojos, ella acabó perdiendo la paciencia con Ramiro. A tal punto llegó la molestia de Romina, que acabó confesando a Luis Piñeyro un plan para engañar a su pareja y así quedarse con todo el dinero a la hora de la definición.
Con una perversa risa que sorprendió a Luis Piñeyro, Romina advirtió: “Miren el programa porque lo voy a seducir toda la tarde“.