El periodismo se caracteriza por ser la piedra en el zapato del poder. Sea de derecha e izquierda, los dirigentes políticos les incomoda la información y la verdad que pueden manejar los periodistas. Por naturaleza, el cuestionamiento y la crítica forman parte del discurso de los comunicadores que tienen como finalidad ser la voz de la conciencia pública. En la Argentina, en las últimas semanas este oficio ha sido atacado por algunos sectores, casos parecidos como en Venezuela y ahora en México, donde se vivió un tenso momento entre el presidente Andrés Manuel López Obrador y Jorge Ramos, reconocido reportero de la cadena estadounidense Univisión.
Esta situación fue analizada por Jaime Bayly en su acostumbrado programa a través de las pantallas de NET TV. El peruano calificó el intenso cruce de Ramos y López Obrador como un “terremoto periodístico”, en referencia a los sismos que se registraron este lunes en la capital mexicana. En este sentido, el periodista de Univisión expresó en una conferencia de prensa del mandatario azteca que el actual gobierno tenía las cifras de violencias más altas de la historia, dato que al jefe de Estado no le agradó.
“Por supuesto que Jorge Ramos tiene razón. No está exagerando. No está mintiendo. La política absurda, boba de López Obrador de abrazos no balazos, ha traído menos abrazos que balazos. López Obrador ha sido un negligente, ha sido un pusilánime, se ha rendido ante los narcos y tienen todo el poder, más que el presidente y los cuerpos militares”, señaló Jaime Bayly tajantemente. Asimismo, aseguró que en México muere gente inocente en manos del narcotráfico. “Y esto es lo que estaba apuntando Jorge Ramos, que además le precisó a López Obrador que no se estaba refiriendo a crímenes de Estado, sino a homicidios dolosos ocurridos en México desde el primer día de su gobierno”, indicó.
“Él no comprende que lo que está denunciando Jorge Ramos es que el mexicano de a pie está amenazado. La inseguridad ciudadana es brutal en México. Los narcos hacen lo que quieren, incluso en los paraísos turísticos. Entran a restaurantes, hoteles, llegan en motos acuáticas, matan a gente en la playa. Hacen lo que quieren y esto lo saben los mexicanos y turistas. Y López Obrador mira hacia otro lado como si él no tuviera la culpa o responsabilidad de atajar ese fenómeno”, enfatizó Bayly.