El programa comenzó con una graciosa introducción sobre el sentido literal y figurado; las metáforas y, el uso del humor absurdo. Cosas que el invitado maneja a la perfección y las sacó a relucir durante la entrevista.
Durante la charla con su amigo Luis Rubio, el rosarino contó que “siempre gano las discusiones” aunque aclaró que ese triunfo se produce en su cabeza y no en la realidad. Granados se definió como un gran discutidor: “ tengo ganas de discutir con todo. Yo quiero tener la razón en la discusión”.
El músico y actor hasta reconoció que “tira flashbacks” cuando de peleas se trata. “Te acordas del martes pasado que dijiste tal cosa, bueno, no es así” comenta al recordar que suele retomar viejos altercados solo para ganar la discusión. Esa tendencia a la confrontación suele intensificarse en las fiestas familiares, especialmente en las navidades y fines de año.
En otro momento del programa, Granados recordó su paso por Infama. El artista comentó que, cuando fue zocalero, llamaba a los amigos y ponía sus nombres en el graph. Eso duró hasta que lo llamó un productor con las capturas de pantalla en la mano y le pidió explicaciones.
Cuando dejó el programa, publicó varios zócalos haciéndose un merecido homenaje a sí mismo. “Esta emisión fue dedicada a Migue Granados, una gran persona”, recuerda el cómico al evocar su apresurada salida del programa.