Un año y siete duros mes han transcurrido desde que Lucas González fue asesinado por la Policía de la Ciudad cuando se movilizaba con dos amigos en un auto y fueron interceptados por el móvil de seguridad porteño que, sin mediar palabra, comenzó a disparar de lleno contra el vehículo.
Joaquín Zuñiga, también integrante del plantel, de 19 años, dialogó con Ernesto Tenembaum en ‘¿Y Ahora Quién Podrá Ayudarnos?’ y dio testimonio minucioso de lo que ocurrió esa mañana de noviembre cuando, lamentablemente, su amigo fue alcanzado por las balas de plomo y perdió la vida. Ambos, eran muy cercanos desde que se habían conocido en las infantiles de Racing.
El sobreviviente recordó que “todo era muy alegre”, pues venían de probarse para el club deportivo y habían obtenido con éxito el pase. Pero, en cuestión de segundos, su destino dio un giro rotundo cuando los caminos se cruzaron con los uniformados. “Es algo que me marcó de por vida y que, a veces, lo recuerdo un poco y me hace mal”, expresó el deportista a duras penas.
Zuñiga no duda que, el hecho de haberse quedado sin club desde enero de este año, tenga como motivo este suceso horroroso. “Mi rendimiento bajó mucho”, reflexionó y agregó que “tenía la cabeza en cualquier lado” producto del “bajón” que le generó el trauma. El entrevistado, si bien aclaró que ahora está “mejor” puesto que “esta con tratamiento psicológico”, puede tender a sufrir “recaídas”: tristeza, “no poder salir de la cama” o “no tener ganas de ir a entrenar”.
“Hubo días en los que no pude salir a la calle, que tengo miedo, que no puedo viajar solo, y tal vez eso no lo sabe mucha gente. Espero poder dejar atrás toda esa situación, de lleno, y poder seguir”, dijo el jugador de fútbol.