La inflación es uno de los problemas que más afecta a la Argentina, y en un contexto global como en la actualidad, varios países del mundo también están sufriendo con este fenómeno económico. En la edición de este martes de “Y ahora quién podrá ayudarnos”, Ernesto Tenembaum analizó este inconveniente pero desde otra perspectiva: el por qué Bolivia, uno de los países más pobres de Sudamérica, no tiene inflación. Pues la cifra semestral fue de tan solo 1,6%.
Tenembaun adelantó que el motivo que hace exitoso a Bolivia en materia inflacionaria no le iba a gustar ni a las personas que tienen pensamientos de derecha ni de izquierda: “Bolivia no tiene inflación por dos razones. Primero, porque produce energía, mucha energía y entonces el principal bien que está generando inflación en el mundo no la tiene que comprar, por lo cual su precio lo regula como quiere”, señaló.
En tanto, la segunda razón, según el mítico periodista, es porque dicho país tiene reservas. “Los bolivianos ahorran en pesos bolivianos, no ahorran en dólares, porque saben que hay dólares”, aseguró, resaltando que el precio de la divisa en este territorio se ha mantenido al menos por una década. Además, destacó que la estabilidad económica de esta nación es a raíz de la nacionalización de la energía.
“El principal elemento de producción y generación de riqueza de Bolivia es el gas y lo nacionalizó apenas llegó Evo Morales, y después hizo contratos con empresas extranjeras, no es que dijo ‘acá los extranjeros, pero la guita la manejamos nosotros, el Estado’, y lo segundo lo administró bien, por eso ahorró“, explicó Tenembaum, destacando que a pesar de ser un país pobre se preparó para cuando llegara una crisis inflacionaria mundial.
“Nadie quiere mirar el espejo boliviano. La derecha no, porque es Evo Morales el que lo hizo. Por eso se dice que fue el mejor gobernante que tuvo Bolivia en la historia. Y la izquierda no lo mira mucho porque tiene unos aspectos ortodoxos de ahorro fiscal y de reservas. Ahí hay un ejemplo para mirar”, enfatizó el comunicador.