Pablo Iglesias, ex vicepresidente de España y fundador de Podemos, analizó la escena política internacional tras las elecciones llevadas a cabo el pasado domingo, cuando el mundo se sorprendió con la victoria de la derecha, siendo que en los últimos años gobernó Pedro Sánchez, representante del partido socialista. Ahora, el tablero y el juego cambió y la ultraderecha avanza con fuerza en la región europea.
En diálogo con ‘¿Y Ahora Quién Podrá Ayudarnos?’, aseguró que este movimiento triunfador “se ha revelado como un poder que la izquierda no ha sido capaz de resistir”. Respecto de la convocatoria “sorpresa” que solicitó el actual Jefe de Estado español para los próximos dos meses, el entrevistado dijo: “Hay que dar esa pelea pero el contexto es enormemente difícil y creo que es lamentable que la derecha y ultraderecha esté leyendo con más inteligencia el espíritu de los tiempos y esté siendo más gramsciana que la propia izquierda a la hora de entender cómo se dan las batallas en nuestra época“.
Aferrado al poder de la izquierda, Iglesias insistió con que debe ser capaz de “institucionalizar una nueva correlación de fuerzas”, puesto que su “problema” es que, aunque gane unas elecciones, desde su punto de vista, después las pierde y “no suele tener esa capacidad constitucional” que -a su criterio- sí tiene la derecha, que “impone” por esa vía “esos procesos de transformación” que “se han traducido en éxitos”.
El exdirigente político español compartió su visión global actual y no pudo evitar hacer una comparación con lo que ocurre en simultáneo en América Latina como, por ejemplo, en Chile “donde estamos viendo la enorme capacidad del gobierno mediático chileno de poner contra las cuerdas a un gobierno que sigue despertando muchas esperanzas”.
Asimismo, mencionó a la Argentina y opinó que “no está claro que lo que representa el proceso de cambio que reencarnaba Cristina (Kirchner)” aún “siendo la que decidió quién fiera presidente, se enfrenta ahora un contexto en el que un ultraderechista tiene posibilidades de ampliar su poder político”.