Los emojis han transformado la forma de comunicarnos. Gracias a las redes sociales y las aplicaciones de mensajería instantánea, las palabras no son la única forma de transmitir ideas, sino que un emoji puede contener mucho significado, así como un gif o incluso un sticker.
Así fue que en Canadá se dio un caso inédito en que un Tribunal dictaminó que el emoji del pulgar hacia arriba puede equivaler a la firma de un contrato. Luego de que dos empresarios tuvieron un intercambio por Whatsapp para arreglar el envío de lino, uno le envió un contrato y el otro respondió con el pulgar pero nunca cumplió con su parte.
“Por favor, confirme el contrato de lino”, fue el mensaje del comprador y la respuesta fue una pulgar hacia arriba. Luego de llevar este caso a la justicia, el demandado expresó: “simplemente confirmaba que había recibido el contrato del lino. No era una confirmación de que estuviera de acuerdo con las condiciones“.
El hecho es que el Tribunal de King’s Bench dictó que debe pagar al demandante 82.000 dólares canadienses. Este es, sin dudas, un fallo novedoso que muestra la gran fuerza e influencia que tienen las redes sociales incluso en los negocios. En este sentido, el juez afirmó sobre el emoji: “Se utiliza para expresar asentimiento, aprobación o ánimo en las comunicaciones digitales”.
“No estoy seguro de la autoridad de esta definición, pero parece ajustarse a lo que yo entiendo de mi uso cotidiano, incluso como recién llegado al mundo de la tecnología. Esta corte reconoce que un emoji de pulgar arriba es una forma no tradicional de ‘firmar’ un documento, pero aun así, bajo estas circunstancias, fue una forma válida de aceptar el contrato“, fueron las palabras del juez.