La solución última a problemas persistentes en un iPhone es también la más radical. Se trata de poner el iPhone en modo DFU, un estado al que debemos recurrir cuando el resto de opciones han fallado. Es algo que debes tener en cuenta, pues no es sencillo y requiere su tiempo, por lo que no se trata de una solución fácil de aplicar.
Si pones tu iPhone en modo DFU, podrás recuperarlo y ponerlo de nuevo en marcha. Eso sí, puede que pierdas datos dependiendo de si no puedes acceder al dispositivo y su copia de seguridad no está al día. Así que utiliza esta herramienta con cautela. Si tienes aún acceso al iPhone, haz una copia de seguridad antes de ponerlo en modo DFU.
Si durante el proceso de poner el iPhone en modo DFU ves algún tipo de logo, es que en realidad has puesto el iPhone en modo recuperación. En ocasiones puede ser suficiente, pero no siempre será la solución a algunos de los problemas que te puedan surgir en el iPhone. Es por ello que si no lo has conseguido, repitas de nuevo el proceso hasta completarlo correctamente.
El modo DFU del iPhone puede servirnos para lo que comentamos, aquellas situaciones donde errores persistentes del dispositivo no se resuelvan. Quienes cacharrean con sus iPhone para hacerles jailbreak, encontrarán en el modo DFU una forma de “liberar” sus dispositivos o devolverlos al “redil” de Apple. También es útil si nos encontramos en una beta expirada del iPhone y queremos volver a usarlo.
En general, poner el iPhone en modo DFU es una herramienta de último recurso si nuestro iPhone ha sido infectado por algún tipo de spyware como Pegasus. Si ya comprobaste que tu teléfono móvil de Apple está afectado, ponerlo en modo DFU será la forma de eliminar todo rastro de este spyware, pues requiere el jailbreak para conseguir sus objetivos.