Tras dos años y medio de relación, Carlota Casiraghi y Dimitri Rassam decidieron sellar su compromiso con una hermosa boda que dejó alucinando a los invitados por sus cuidados detalles.
En primera instancia está el lugar que la pareja eligió para llevar adelante la ceremonia: Saint-Rémy-de-Provence. Este sitio es sumamente especial tanto para Carlota como para su madre, Carolina de Mónaco, ya que aquí decidieron vivir luego de la muerte de Stéfano Casiraghi.
Asimismo, el vestido seleccionado por la novia es un claro homenaje a su mamá, quien utilizó un atuendo muy similar para su casamiento con Philippe Junot celebrado también el 29 de junio pero de 1978.
Realizado por Giambattista Valli Haute Couture y con un claro estilo vintage, escote semitransparente, mangas sueltas y detalles florales bordados, Carlota optó por llevar un ramo de flores de lavanda para completar el look.
En cuanto a las joyas, la novia optó por lo simple: unos pequeños pendientes de diamantes y un colgante a juego.
Mirá las fotos del look: