Si hay algo que identifica la cultura española, además de su gastronomía e historia, son los bares. De hecho, España es el país con más bares per cápita del mundo. Evidentemente, ir a tomar cervezas, solos o con amigos, es una de las rutinas preferidas de muchos de sus ciudadanos. Pero a raíz de la cuarentena por coronavirus, muchos clientes tuvieron que quedarse en sus casas y posponer sus “cañas” por un rato.
Tanto es así, que un hombre español esperó a que vuelva abrir su bar preferido tras el confinamiento -que en el país europeo continúa su desescalada- e ir a pagar todas las cañas que no se tomó en esos meses.
Según informó Cadena Ser, el cliente se dirigió al bar Can Juli, ubicado en Granollers (Barcelona). Se dirigió a los dueños con un papel y expresó la necesidad de hablar con ellos. En el papel tenía una serie de cálculos y el resultado era la cantidad de dinero que les “debía” por la cervezas que no se tomó.
“Como había dejado de venir 36 veces y siempre se gastaba 2,50, ¡pues 90 euros! Al principio mi hermano no quería cogerlo, pero él insistió mucho. Le dijo que lo que había pasado era muy fuerte y que, aunque no se hubiera tomado esas cañas, quería ayudar. En el sobre, de hecho, había 100 euros, no 90“, explicaron los dueños del bar.