Durante la última semana, la crisis por el coronavirus creció fuertemente en Italia, donde los hospitales y sanatorios sufren por la gran demanda de válvulas respiratorias para aquellos que buscan sobrevivir a la pandemia.
Funcionaban bien y repartieron más de 100 ejemplares, motivo por el que se filtró quiénes eran y tuvieron problemas. Es que la compañía que las fabricaba inicialmente, las vendía a un costo de €10.000 y no habían dado el permiso universal de sus diseños. Por eso, amenazaron a estos emprendedores con una demanda de patentes.
¿Qué harán estos dos individuos ahora? Ya acataron el pedido y se comprometieron a no difundir “la fórmula”, dado que de ese modo afrontarían una demanda aún más potente. Como contrapartida, la ministra de Innovación Tecnológica y Digitalización de Italia felicitó a Massimo y a Cristian.