El papa Francisco se encontraba en la audiencia general que hace con los fieles todos los miércoles en el patio de San Dámaso en el Vaticano cuando fue sorprendido por la visita de Spiderman, quien apareció este 23 de junio entre los presentes y le regaló una de sus máscaras.
El hombre que portaba el traje de superhéroe se llama Mattia Villardita, tiene 28 años y desde hace 4 comenzó a vestirse como el admirado personaje de Marvel para llevar un poco de alegría a niños hospitalizados. El joven creó la fundación “Supereroincorsia” (superhéroes en la sala) y, junto a otros voluntarios realizan la noble labor.
Al ver su loable iniciativa, la Inspección de Seguridad Pública del Vaticano invitó a Villarditta a la sala de pediatría del Policlínico Agostino Gemelli de Roma para que, junto a con la banda musical de la Policía de Estado italiana, logren “arrancar una sonrisa a los pequeños que están en el hospital”.
Mattia padece una enfermedad congénita y decidió comenzar a usar el disfraz para darle un rato ameno a los niños porque, según contó, le habría “encantado (…) ver a Spiderman entrar por la ventana” cuando estuvo internado en el hospital durante su infancia.