“La ballena” es una de las películas que más ha llamado la atención en los últimos meses. Se trata de un drama dirigido por Darren Aronofsky, conocido fundamentalmente por “Réquiem por un sueño” y “El cisne negro”, y protagonizado por Brendan Fraser, quien vuelve al cine luego de años apartado de la industria.
“Un solitario profesor de inglés que vive con obesidad severa intenta reconectarse con su distanciada hija adolescente, para tener una última oportunidad de redención”, es la sinopsis compartida por Cines Argentinos y será a partir de este jueves 2 de marzo que se podrá ver en salas.
Uno de los aspectos más destacables de la película es la actuación de Fraser, quien entrega su costado más emocional para interpretar a un hombre que se autoflagela con comida luego de haber tenido dos eventos traumáticos en su vida: la muerte del amor de su vida y haber abandonado a su hija cuando tenía 8 años.
Aronofsky, al igual que en la mayoría de sus películas, va al hueso y no deja al espectador afuera de nada. Nos muestra cómo el cuerpo de Charlie, el protagonista, ya no soporta más, cómo sus relaciones personales se han visto deterioradas por su enfermedad y cómo es la vida de una persona que se ha convertido en un paria. Así, nos entrega una película sumamente emotiva y con grandes cuotas de empatía.
Sus nominaciones al Oscar
“La ballena” ha recibido tres nominaciones a los premios Oscar: Mejor actor, Mejor actriz de reparto por Hong Chau y Mejor maquillaje. Lo cierto es que la transformación de Fraser es uno de los puntos más sorprendente de esta película que no solo muestra una realidad que muchas veces está oculta sino que nos hace sentir parte del cuerpo de Charlie.