Luego de 30 años de que la Voyager 2 haya sobrevolado Neptuno, el 25 de agosto de 1989, la NASA anunció que planea volver a realizar una misión para acercarse a Tritón, la luna más grande del lejano planeta.
“Las vistas eran tan impresionantes como desconcertantes, revelando enormes y oscuras columnas de material helado que salían de la superficie de Tritón”, comentaron desde la agencia espacial al describir las imágenes del paisaje formado por una superficie de hielo “joven”.
Fueron esas fotos las que generaron un sinfín de preguntas respecto de la misteriosa luna: ¿Cómo puede ser que una luna antigua ubicada 6 veces más lejos del Sol que Júpiter y 30 más que la Tierra, pueda seguir activa? Los investigadores comenzaron a especular que esa luna podría tener un océano debajo de su superficie.
Este hecho será uno de los principales puntos de la investigación que llevará adelante la nueva misión Trident que pondrá en marcha la agencia espacial en el marco del Programa Discovery. El lanzamiento está programado para octubre de 2025 ya que en esa fecha la Tierra estará alineada con Júpiter.
Así, la nave espacial se impulsará hacia Tritón usando la atracción gravitacional de Júpiter y podría llevar un encuentro de 13 días en el año 2038.
“Después de 13 años de volar a través del Sistema Solar, podemos deslizarnos con confianza por el borde superior de la atmósfera de Tritón, lo cual es bastante alucinante”, comentó William Frazier de Jet Propulsion Laboratory (JLP), uno de los ingenieros de sistemas de proyectos de Trident, llamada así en homenaje a la lanza de tres puntas que portaba el antiguo Neptuno, dios romano del mar.
La misión Trident tiene como objetivo comprender dónde podría haber agua y, de esta forma, averiguar qué factores conducen a que un cuerpo del Sistema Solar tenga los ingredientes necesarios para ser habitable.
¡Mirá todo sobre la misión!
https://www.youtube.com/watch?v=Uq4HWsLeoHM