Hoy se cumplieron seis años de la muerte del fiscal Alberto Nisman, un hecho que generó un sinfín de controversia en el sistema político y judicial de Argentina. El fallecimiento de Nisman no solo disparó muchas teorías sobre lo ocurrido la noche en la que falleció sino que hasta el día de hoy el caso sigue envuelto bajo un halo de misterio.
Tanto se habló sobre el tema que el año pasado Netflix lanzó un documental titulado “Nisman: El fiscal, la presidenta y el espía” en donde se plasmó el tratamiento del hecho bajo distintas miradas. El realizador de la producción, Justin Webster, utilizó más de mil horas de material en seis episodios que intentan abordar todos los ángulos del caso.
En los episodios de una hora vemos a los ditintos protagonistas en la vida de Nisman, desde la fiscal Viviana Fein, pasando por el ex secretario de Inteligencia Oscar Parrilli, por la jueza federal -y ex pareja- Sandra Arroyo Salgado y hasta Diego Lagomarsino, actual incriminado como partícipe necesario en su muerte. Asimismo aparecen dirigentes de distintos partidos como Laura Alonso y un convaleciente Héctor Timerman.
Viviana Fein
La fiscal jubilada Viviana Fein, primera instructora de la causa, ahora “reivindicada” por Netflix.
Oscar Parrilli
Es un abogado y político argentino. Actualmente es Senador de la Nación Argentina por la Provincia de Neuquén. Ejerció el cargo de Director General de la Agencia Federal de Inteligencia desde agosto hasta el fin del mandato de Cristina Fernández de Kirchner, el 10 de diciembre de 2015.
Sandra Arroyo Salgado
Es Jueza federal de San Isidro y ex esposa del fallecido fiscal Alberto Nisman. Actualmente es querellante en la causa de la muerte de su ex marido con quien tuvo 2 hijas.
Diego Lagomarsino
El perito informático está imputado por integrar, según la acusación, un comando que habría asesinado a Alberto Nisman en su departamento de Puerto Madero en 2015. Recién en octubre de 2020, luego de casi seis años de investigación donde no se pudo encontrar una sola prueba que vincule al técnico informático con un comando criminal, le notificaron que ya no llevará la pulsera electrónica que se usa para controlar a los procesados a los que se pretende monitorear