A su regreso de los Estados Unidos donde se reunión con funcionarios del Fondo Monetario Internacional (FMI), el ministro de Economía podrá sentirse contento con su gestión. Durante su viaje logró que los organismos internacionales le desembolsaran unos US$ 2.000.
De ese total, US$ 900 millones los proveerá el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), US$ 600 millones el Banco Mundial y el Fondo Árabe para inversiones en infraestructura aportará otros US$ 500 millones.
Además de los necesarios fondos frescos, Massa logró abrir una negociación con el FMI para que, en las metas de este año, se tengan en cuenta las importantes consecuencias negativas que la sequía provocó en la economía nacional. Desde el Palacio de Hacienda consideraron que “es un triunfo poner la sequía en la agenda del FMI” y señalaron que están dialogando para “construir un puente de confianza”.
En las dos próximas semanas, las negociaciones con el organismo que conduce Kristalina Georgieva girarán en torno a los nuevos objetivos de reservas internacionales, el déficit fiscal y la emisión monetaria para el año en curso.
El ministro viajó el pasado miércoles para participar de las reuniones de la primavera boreal del Fondo Monetario Internacional y el Banco Mundial. Massa se reunió con la número dos del fondo, Gita Gopinath con quien gestionó el otorgamiento de los desembolsos.