Este jueves 29, en la ciudad de Barcelona, buscaban intensamente a Amèlia, una niña de tres años que fue retirada de la escuela por un desconocido. Afortunadamente, la pequeña fue encontrada a salvo junto a Juan Manuel, un padre separado que admitió habérsela llevado por error, pensando que era su hija.
Tras ser indagado por la policía, el hombre admitió que nunca notó los cambios físicos en su heredera heredera ya que hacía dos años que no la veía y creyó que “eran normales”. Además, justificó su accionar: “Sentía que era mi hija”.
“Durante las dos horas, la traté como mi hija, merendamos y jugó con su hermana, hasta que recibí el llamado de la policía”, confesó al devolver a la nena. Del mismo modo, reveló que su intención no era “secuestrarla”, sino que fue una confusión.
Inmediatamente Juan Manuel se disculpó con los verdaderos padres de la pequeña y subrayó que la responsabilidad fue de la escuela. En ese sentido, explicó que él llegó al establecimiento educativo con una orden judicial para retirar a su hija Amèlia pero las maestras le entregaron a otra niña, que tenía el mismo nombre pero, claramente, distinto apellido.
Según explicó el hombre, perdió el contacto con su hija como consecuencia de una separación conflictiva, hace más de dos años no tenía contacto físico y a través de sus abogados pudo conseguir un permiso para pasar la tarde con ella.
Por último, aprovechó su exposición ante los medios de comunicación para exigirle a la Justicia catalana que revea su régimen de visitas y le permita rencontrarse semanalmente con su la pequeña.
Mirá las fotos de Amélia, la niña que fue separada de su padre hace dos años: