Lionel Messi debutó oficialmente en Barcelona el 16 de octubre de 2004 y los ojos del mundo se posaron sobre ese chico de poco más de 17 años y con un fuerte aspecto de crack. No tardó en mostrar su repertorio.
Es que a medida que se fue afianzando, el rosarino hacía cosas descomunales. Desde golazos imposibles hasta mostrar un despliegue físico importante. Pero hubo un día en que hizo un clic. Se trata del 18 de abril de 2007, cuando anotó dos tantos en la semifinal de la Copa del Rey ante Getafe. Uno de ellos fue un calco de la corrida memorable de Diego Maradona ante Inglaterra, en el Mundial 1986.
El astro tomó el balón sobre la derecha. Se sacó de encima a Nacho con un caño, luego con un toque muy sutil se deshizo de Paredes. Con la pelota pegada al botín izquierdo y a gran velocidad, Messi tachó a Alexis y entró al área, donde encaró a Belenguer y quedó mano a mano con Luis: gambeta larga y definición de derecha.
Los medios ya comparaban a Lio con Diego, pero desde ese momento todo se potenció. Hasta su nivel. Empezó a crecer como jugador total, se superó día a día y lo sigue haciendo.
¡Mirá el gol más maradoniano de Lionel Messi!