Sinaloa se ha revolucionado desde que Diego Maradona asumió como entrenador de Dorados. Ya puso al equipo dos veces en la Liguilla y arribó a su segunda final por el Ascenso MX.
Esta vez, el Gran Pez empató 1 a 1 en la ida, como local ante San Luis. Sin embargo, el director técnico estalló contra Juan Esquivel, árbitro del partido. Es que iban 8 minutos, cuando un defensor de la visita rechazó con la cabeza, pero el juez cobró penal para Dorados que Cristian Báez transformó en gol. Ya a los 71, los Tuneros igualaron por medio de Juan David Castro.
Diego explotó en conferencia de prensa contra el colegiado, ya que considera que su fallo lo condicionó: “Yo no hablo de mala leche. Es malo. Hay árbitros buenos y malos; este es malo. No le busquemos otra cosa. Estaba más pendiente del auricular, donde seguramente le decían que no había sido penal. Después no nos cobró ni una a favor”.
El 10 no vio con claridad si fue bien sancionado el tiro desde los doce pasos, ya que “estaba lejos” y “no sabía dónde le había pegado”, pero marcó con insistencia: “Después hubo un penal muy claro a Rubio Rubin, pero no lo cobró”.
Dorados necesita ganar en San Luis (domingo a las 22:00 hrs.) para forzar un tercer partido y seguir soñando por el ascenso.
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