Marcelo Daniel Gallardo es uno de los personajes más atrayentes del fútbol argentino. No sólo fue un eximio futbolista que se lució en River, Mónaco, PSG, DC United y Nacional de Uruguay, sino que también lo hizo con la camiseta de la Selección Argentina. Pero su figura como jugador quedó minimizada por todo lo que logró como entrenador del Millonario.
Claro que detrás -o delante- del profesional hay una persona que tiene hobbies, opiniones sobre asuntos ajenos al deporte y en esta oportunidad, el Muñeco mostró su costado íntimo en un mano a mano con Juan Pablo Varsky, en su podcast.
El director técnico de River reveló que se alistó para estar óptimo en el momento en que lo llamaran desde Núñez: “Lo hice queriendo no tener nada librado al azar, aunque no sabía cuándo me iba a llegar. Esperaba que me fuera bien. Me preparé para que me fuera bien, pero vivir lo que vivimos en este corto período, no. Sucedieron cosas que van a marcar la historia del club”.
Claro que su gran momento ha potenciado su fama y el idilio por parte de los hinchas. Pero él no se pierde en ese mundo paralelo. “Me da un poco de vergüenza cuando me elogian mucho, no me lo creo. A veces ni me doy vuelta cuando me llaman así, Napoleón. Trato de convivir con todo eso de la manera más natural posible. Siempre fui medido, nunca me gustó mucho la exposición, pero ahora considero que tengo que hacerlo un poco más. No porque me incomode a mí, sino porque incomoda a los que están conmigo”, afirmó el DT.
Dentro de esa influencia que tiene, Marcelo contó por qué se creó una cuenta de Twitter en la que volcó mensajes interesantes, pero que al poco tiempo dejó de usar: “Había gente que se hacía pasar por mí y algunos medios de comunicación lo tomaban. Me parecía que no debía pasar eso, no eran palabras ni pensamientos míos, por eso me hice un Twitter propio. Cuando abrí la cuenta puse alguno pensamientos, una manera de sentir. No eran muchos, pero sí eran momentos puntuales. Dejé de tuitear porque considero que es una herramienta válida para utilizarla de manera profesional, pero que me parece una pérdida de tiempo cuando no la utilizás como tal. Prefiero ocuparme de las cosas que me posibilitan hacer algo funcional a lo que yo pienso y hago. No tengo tampoco mucho tiempo para eso. No podemos hacer todo público. En mi caso particular, lo que uno pone genera ecos y se puede tomar para cualquier lado”.
Justamente en referencia a su tiempo de ocio, Gallardo reveló que tiene dos amigos que de chicos juegan al tenis, deporte que él también practica. Avisó que no tira ni rompe raquetas, pero sí se calienta mucho: “Tiene que ver con una autoexigencia muy alta. No me gusta jugar a nada que más o menos no pueda dominar. Me frustra. No es porque pierda, sino porque me gusta poder mejorar y cuando veo que eso no sucede, me frustro. Tengo dos amigos que juegan desde chicos y yo jugaba al fútbol; nunca le había dedicado tanto tiempo, pero quería jugar como ellos. Eso me frustraba”.
¿Qué más hace el Muñeco para desconectarse de su tarea como entrenador? “A veces puedo y a veces no. En un momento todos hablaban de Netflix y dije, ‘bueno, vamos a probar’. Me prendía con alguna, pero enseguida pensaba en otra cosa. Cuando jugaba me compraba las temporadas enteras y las veía. A veces me pasaba de rosca, eran las cinco de la mañana y seguía despierto. Ahora tengo menos espacio para eso. Me enganchó mucho House of Cards y ahora veo Billions, estoy al día en esa”.
El exenganche contó que además lee muchos libros y es rockanrolero: “Me regalan muchos. Leo biografías, cosas vinculadas al fútbol, liderazgo. Y escucho música, soy del palo del rock. Cuando era adolescente, con mi grupo de amigos hacíamos vereda y sonaba AC/DC, Led Zeppelin, Metallica, Iron Maiden…”.
ESCUCHÁ ACÁ LA ENTREVISTA COMPLETA: https://ar.radiocut.fm/podcast-episode/marcelo-gallardo/
BONUS TRACK: Mirá el video y escuchá a Gallardo hablando sobre su cuerpo técnico.