Un posteo de Instagram realizado por un cirujano plástico parece haber afectado la tranquilidad del Palacio de Kensington. Con dos fotografías que mostraban el supuesto antes y después de Kate Middleton, el profesional aseguró que la duquesa de Cambridge utilizaba bótox para reducir sus líneas de expresión.
“Nuestra Kate ama un poco el baby botox”, escribió el médico Munir Somji, de la Dr. Medi Spa Clinic sin esperar las repercusiones que tuvo su publicación sobre la mujer de 37 años.
Luego de la polémica que terminó con el posteo eliminado, el propio portavoz del Palacio declaró ante el New York Post que los dichos del doctor eran “categóricamente inciertos” y aseguró que “la familia real nunca respalda ninguna actividad comercial”.
En las imágenes se pueden ver varias diferencias en el rostro de la duquesa, sobre todo debajo de los ojos y en la frente. “Noten la reducción de finas líneas en la frente, pero también noten la caída de la ceja media (la parte de en medio) y la elevación en la cola lateral”, había comentado Somji para referirse a los beneficios del baby botox.
¿Será cierto?