La vida de Pampita ha sido una montaña rusa. Su aspecto sentimental, vida familiar y profesional, siempre es tema de conversación en programas de chimento y portales de internet. El 2022 ha sido muy importante para ella, ya que se consagró con el éxito revelador del año, “El Hotel de los Famosos”, un formato grabado que funcionó para El Trece.
Dicho espacio tendrá una segunda temporada que muy pronto comenzará su rodaje. Sin embargo, la modelo también tiene otro tipos de deseos profesionales, lo cual los confesó en el ciclo de Ángel De Brito de América TV. Develó que quiere regresar a hacer televisión en vivo, y no descartó un posible regreso de “Pampita Online” que se transmite por Net Tv.
“Me encanta el día a día. ¡Porque yo soy re chusma! Yo me sé todo de todo el mundo. Me levanto y me leo todos los portales”, aseguró Pampita, adelantando también que está en proceso la tercera temporada de “Siendo Pampita” de Paramount+.
Además, habló sobre la antigua Pampita y cómo ha madurado con el pasar de los tiempos. “La vida misma te ubica en lo importante. Después de vivir ciertas cosas, ya no querés enganchar con nada feo ni que te haga mal”, reflexionó la ex de Benjamín Vicuña. Sobre sus antiguas polémicas, señaló que era más joven y no había pasado por tantas cosas.
“Ya después decís: ‘Esto es para una edad’. No podés seguir así, tenés que evolucionar. Al principio no tenés la sabiduría. Después, el amor, el desamor, las cosas que te suceden, la vida, la muerte, todo te hace aprender y te hace ubicarte“, enfatizó Pampita.
Pampita y su fracaso en el 2018
Pampita en el 2018 aterrizó en Telefe para estar a cargo de “Pampita Online”, sin embargo, el programa salió del aire tres meses después por su sorpresiva renuncia. “Yo no estaba muy bien en ese momento en lo personal para dar mi mejor versión. No lo tomé con responsabilidad ese trabajo, me da la sensación”, confesó. En este sentido, reconoció que llegaba descolocada al estudio por cosas personales que no le permitían enfocarse.
“Como que era algo desconocido y el programa cambiaba todos los días, no tenía un formato propio. Hoy capaz que me planto y digo ‘no’. Pero en entonces experimentábamos todos los días. Me ponían cucaracha y, si el invitado no funcionaba, íbamos a un juego. Y si el juego no funcionaba íbamos a otra cosa. Yo estaba como un ping pong adentro del estudio, ingenua, entregada al minuto a minuto porque el canal así lo pedía”, recordó.