El poder de Pablo Escobar es de gran magnitud en Colombia; sin embargo, no logró concretar una salida política para evitar que lo extraditen a Estados Unidos. Su siguiente jugada es intimidar a las autoridades y darles dinero a cambio de protección.
Por otra parte, sus detractores están más cerca de lo que cree. Un piloto que trabaja para el cartel le da unas comprometedoras fotos a la DEA.