Así lo informó el periodista Pablo Corso en Modo Fontevecchia donde comentó que Argentina es un exportador neto de litio, con más del 15 % de la producción mundial, y que este, será el insumo fundamental para que luego las pymes y los laboratorios completen el proceso de fabricación de las baterías que se encuentran en notebooks, celulares, tablet, etc.
Respecto de las causas por las que se consideró crear fábricas que trabajen este metal blando fue a raíz de la demanda de la industria de automóviles eléctricos, “Sí en 2017 había 3.000.000 de autos eléctricos, en 2030 esa cifra podría elevarse a 125.000.000 de automóviles en todo el mundo”, especuló.
El periodista agregó también que las exportaciones de litio fueron de 200.000.000 de dólares en 2021 pero podrían subir a 4 mil millones en seis años, “El gran desafío sigue siendo aportar conocimiento a la cadena del valor del litio, algo que Argentina no está haciendo”.
En cuanto a la puesta en marcha de la fábrica, se sabe que en diciembre comenzará a regir la producción industrial de las celdas para las baterías de litio. Corso concluyó al respecto que a partir de las denuncias que se recibieron sobre los controles ambientales, Argentina debería reforzarlos para su mejor funcionamiento y aprovechar así de esta oportunidad económica que se presenta.