A poco de finalizar el tercer año de su mandato, Alberto Fernández sostiene que, además de los problemas que atraviesa el país, hay buenos indicadores que no tienen la prensa que deberían tener. “El problema estuvo en que ha habido una actitud mediática de ocultar las cosas ponderables de la Argentina. Nos llenaron de tapas por las vacunas y después, cuando la Argentina terminó siendo el país que más inmunidad había logrado, nunca lo publicaron” aseguró.
El presidente estima que “hemos tenido una siembra de desánimo permanente de un sistema mediático que nunca quiso tomar en cuenta estos datos ponderables. Siempre lo que inyectó en la sociedad argentina es un desánimo, una mirada absolutamente negativa de la Argentina”.
Con respecto a su relación con Cristina Fernández, el titular del Poder Ejecutivo afirmó que “si tenemos diferencias” es porque “tengo mis propias miradas, mis propias visiones, valoro mucho las miradas de Cristina, las respeto por sobre todas las cosas, pero necesariamente no pensamos igual en algunas cosas”.
En relación a la idea de que es un títere de la vicepresidenta, Fernández señaló que “muchos medios instalaron, desde el primer día, que Cristina iba a hacer de mí un títere. Pero quiero ser franco porque no quiero mentir. Cristina, que me conoce, nunca quiso hacer un títere de mí, sabe que no soy eso. Entonces no es que Cristina lo intentó y le salió mal. Cristina siempre me ha respetado en ese sentido, lo que pasa es que hubo momentos, con la dinámica vertiginosa que vivimos en estos tres años, en donde nos descubrimos con miradas diferentes y ahí predominó mi decisión, no la de ella”.
El voto empresario
En otro tramo de la entrevista, el presidente explicó cuál es, según su visión, el motivo que hace que los empresarios no voten al peronismo. “Es un problema de clase” que constituye “un obstáculo para poder votarnos” aseguró.
“Una vez tuve esta charla -recuerda Fernández – con un dueño de una de las dos o tres empresas más grandes de la Argentina, y le pregunté cómo votaba. Me había contado que con Macri le había ido muy mal, y que en la historia de la empresa había tenido los primeros balances en rojo con Macri. Le pregunté: ¿a quién votaste en 2017? “Voté a Macri”. ¿Y cómo te había ido con Cristina antes? “Bien, me fue bárbaro con Cristina”. ¿Y por qué no votás al peronismo? “Y bueno, hay cosas que no me gustan del peronismo”. Le digo: lo que vos no te permitís es votar igual que tus trabajadores”
Según el primer mandatario, los empresarios que no los votan “son los mismos que vieron todo el juego de especulación financiera que se vivió en los años de Macri, en desmedro de la producción, que es lo que ellos representan”. Ante esa contradicción, Fernández afirma que “no nos votan porque somos representantes de los que trabajan en esas empresas. Somos los que cuidamos los derechos de los que trabajan en esas empresas, y es en esa mirada de clase donde está el obstáculo para poder votarnos”.