Este destino campestre es muy conocido por su hermosa laguna donde se pueden realizar actividades para todos los gustos. Un clásico es darle la vuelta a la laguna. El circuito es de 50 km, una distancia ideal para recorrer en las bicicletas que alquilan en la costa.
Quienes se animen con las actividades acuáticas, pueden practicar windsurf, dar un paseo en regata o alquilar un kayak para recorrer la laguna. La ciudad de Raúl Alfonsín es un destino muy apreciado por los pescadores. Chascomús tiene uno de los mejores espejos de agua de la provincia de Buenos Aires y allí se pueden pescar pejerreyes y tarariras. Dicen los pescadores que la laguna nunca defrauda con el pique porque “el que busca siempre encuentra”.
Si la idea es tener un momento de adrenalina, nada mejor que un bautismo en el aire. Saltar en paracaídas es una experiencia única que no hay que dejar pasar. En el aeródromo, las empresas ofrecen el servicio desde $34.000.
La ciudad también ofrece actividades más tranquilas como visitar la casa del ex presidente radical o recorrer el Museo Pampeano. Un lugar muy interesante para conocer es la Capilla de los negros donde la comunidad africana que llegó a Chascomús en el siglo XVIII realizaba sus prácticas religiosas.
Al finalizar la jornada, nada mejor que armarse de un buen mate y sentarse en el borde de la laguna para disfrutar de uno de los atardeceres más bonitos de la provincia.
Para acompañar el mate, lo ideal son las exquisitas medialunas que son famosas en la ciudad. A la hora de cenar, los restaurantes que rodean la laguna ofrecen un muy buen menú para todos los gustos y bolsillos con una inolvidable vista al espejo de agua.