Cecilia Moreau: “Si Alfonsín estuviera vivo, no se habría hecho la alianza del radicalismo con Macri”
La vicepresidenta del bloque describió su mirada sobre las internas del Frente de Todos.
En un mano a mano con Jorge Fontevecchia en Periodismo Puro, Cecilia Moreau aseguró que en Diputados es donde mejor funciona la coalición gobernante. De origen “más alfonsinista que radical”, luego de Gualeguaychú y la creación de Cambiemos, comenzó a militar en el Frente Renovador.
Comparte espacio con varios dirigentes de una generación aún más joven y en la Cámara se reencontró políticamente con su padre, “un kirchnerista intenso”. Fue una de las defensoras más lúcidas y apasionadas de la ley de interrupción voluntaria del embarazo.
“Estamos en presencia de una nueva generación que vino a gobernar la Argentina y hacerse cargo de las deudas de la democracia. Se percibe en los distintos espacios políticos. En el Frente de Todos lo veo muy claramente. Sergio Massa debe ser históricamente, junto con algún otro de transición, el presidente más joven de la cámara. Máximo es un presidente de bloque muy joven para lo que es el viejo peronismo. También con pocos años soy vicepresidenta del bloque”, aseguró.
Asimismo, hizo referencia a varias colegas que representan la renovación constante del bloque: “También podría hablar de Luana Volnovich en el PAMI, Malena Galmarini en AySA, Fernanda Raverta en la Anses; de intendentes jóvenes; de Martín Lousteau en el Senado y su irrupción en Cambiemos y en el radicalismo. Eso nos hace bien, sin que signifique ni jubilar ni desplazar a nadie“.
Al ser consultada si dentro de unos años hablaremos más de Cristina o de Máximo Kirchner, Moreau comentó: “La figura de Cristina va a ser disruptiva, como la de Raúl Alfonsín, la de Néstor, la de Evita, son figuras de la democracia que trascendieron su momento, y la historia la va a recordar. Espero que hablemos dentro de unos años de Máximo. Significará que como generación hicimos las cosas bien. Se habla mucho de la vieja y de la nueva política. No hay vieja y nueva política. Hay mala y buena. Un dirigente a un militante político lo lleva en la sangre y lo siente como una vocación. Tampoco se le puede pedir que se jubile por una cuestión cronológica”.
