Durante las primeras horas del martes trascendió en los principales medios de comunicación el contenido del último correo electrónico que el propietario de medios e inversor estadounidense, Steve Jobs, envió a sí mismo antes de morir y que llamó la atención por las palabras con las que se despidió.
Esto sucedió a raíz de una nueva publicación en el marco de una sección dedicada a los mails del magnate cuyos registros se encuentran en el sitio web ‘Steve Jobs Archive’, en donde se recopilan citas, videos todo tipo de información relacionada al fundador de Apple.
En el correo electrónico, Jobs, se refiere al delicado estado de salud que atravesó antes de morir aquel 5 de octubre del 2011 en donde, como consecuencia de un paro respiratorio, perdió la vida tras padecer cáncer neuroendocrino de páncreas. “Cuando necesité atención médica, no conseguí sobrevivir.”, apuntó el inventor.
Asimismo, el padre del primer ordenador personal, se refirió a todos los recursos materiales con los que contó durante su vida y cuál fue el valor de cada uno de ellos en cada momento ya se en el ámbito personal como profesional.“Yo no inventé el transistor, el microprocesador, la programación orientada a objetos ni la mayor parte de la tecnología con la que trabajo”, resaltó el empresario.
E-mail traducido
Cultivo poco de lo que como, y de lo poco que cultivo
no crié ni perfeccioné las semillas.
No confecciono mi propia ropa.
Hablo una lengua que no he inventado ni perfeccionado.
No descubrí las matemáticas que utilizo.
Estoy protegido por libertades y leyes que no he concebido, legislado, aplicado o juzgado.
Me conmueve música que no he compuesto yo mismo.
Cuando necesité atención médica, no pude
para ayudarme a sobrevivir.
Yo no inventé el transistor, el microprocesador, la programación orientada a objetos ni la mayor parte de la tecnología con la que trabajo.
Amo y admiro a mi especie, viva y muerta, y soy totalmente dependiente de ellos para mi vida y mi bienestar.
Enviado desde mi iPad