Un evento ocurrido ayer por la tarde en el centro de Neuquén dejó a todos sin palabras. Según relató el director de Tránsito de la municipalidad, Facundo Churrarín, una agente denunció una agresión por parte de un conductor que estaba estacionado en una rampa para discapacitados ubicada en el centro de la ciudad, sobre la diagonal Alvear, a metros del palacio municipal.
El enfrentamiento entre ambos comenzó cuando la mujer se aproximó al vehículo del hombre para comentarle que no podía detenerse obstruyendo la rampa, hecho que desencadenó el enojo del conductor. Al aproximarse hacia la ventana y advertirle que debía salir del lugar, el hombre se negó diciendo: “esta rampa es para mi, yo soy discapacitado”.
Cuando la inspectora insistió, el hombre se enojó y en medio de la discusión decidió sacarse su pierna ortopédica y arrojársela a su interlocutora. La prótesis fue detenida por la puerta del vehículo y quedó sobre el asiento del acompañante sin causar ningún daño.
La situación atrajo las miradas de los transeúntes hasta que una mujer que se encontraba en un local cercano se subió al vehículo y el hombre salió del espacio.
¡Insólito!