El Tribunal Oral y Correccional N°8 leyó hace instantes el veredicto por el trágico fallecimiento de Débora Pérez Volpin cuando ingresó al quirófano para realizarse una endoscopía. A poco más de un año de su muerte, se levantó la feria judicial para llevar adelante el juicio que tenía a dos imputados por “homicidio culposo“, la anestesista Nélida Inés Puente y en endoscopista Diego Bialolenkier.
Finalmente, el fallo dictaminó para el endocopista Diego Bialolenkier 3 años de prisión condicional y 7 años y seis meses de inhabilitación profesional. Además, el juez falló a favor de la absolución de Nélida Inés Puente.
El juicio se desarrolló durante siete jornadas, donde ambos profesionales se acusaron mutuamente. El endoscopista en todo momento dijo que Volpin murió por un error cometido por la anestesista por perforarla cuando la entubó, mientras que ella disparó contra su colega al afirmar que este había mentido al decir que el endoscopio estaba en perfecto estado, ya que, según ella, él la habría perforado accidentalmente con el instrumento durante el estudio. “Estoy indignada por las declaraciones de mi colega, yo pensé que iba a decir la verdad, si lo juró por sus hijos“, había declarado ayer Puente ante el juez Javier Anzoátegui, titular del Tribunal.
Por su parte, Diego Pirotta, el abogado de la familia de la periodista, había solicitado esta mañana una pena de cuatro años y medio de prisión para el médico endoscopista Diego Bialolenkier y tres años en suspenso para la anestesista Nélida Puente. Además, pidió 10 años de inhabilitación para ambos especialistas involucrados en la intervención, investigar asimismo a la clínica donde se realizó el estudio por encubrimiento y a la instrumentadora quirúrgica por falso testimonio.