Javier Mascherano habló tras el escándalo Argentina-Marruecos
El entrenador de la Sub 23 contó enfurecido a la prensa lo que vivió en primera persona tras lo ocurrido en el inicio de los Juegos Olímpicos.
Oficialmente empezaron los Juegos Olímpicos y su inicio fue un verdadero escándalo a nivel internacional. La Selección Argentina Sub 23 dirigida por Javier Mascherano cayó ante Marruecos por 2 a 1 en el estadio Geoffroy-Guichard de Saint-Etienne. Un encuentro que tuvo una postergación de más de una hora y cuarenta minutos, con la intervención del VAR que anuló la conquista de Cristián Medina que hubiera establecido el empate.
Una gran cantidad de personas ingresaron a la cancha en el segundo tiempo y hubo agresiones a los jugadores sudamericanos con proyectiles. Además, el arbitro sueco Glenn Nyberg le permitió a los protagonistas una entrada en calor de 10 minutos para disputar los últimos 180 segundos del partido.
“Comentarte qué pasó, no lo sé. Estuvimos una hora y media en el vestuario, donde en ningún momento nos comentaban qué es lo que podía pasar, nunca nos avisaron. ‘Estamos viendo’, nos decía. De hecho los tres capitanes de Marruecos entraron al vestuario y no querían seguir jugando. La posición nuestra era no jugarlo más porque nos tiraron un millón de cosas, se paró el partido siete veces… No me pasó nunca como jugador que en un partido de este nivel falle siete veces la seguridad. ¡Siete veces falló!”, sostuvo Javier Mascherano en rueda de prensa al finalizar el partido.
“Volaban botellas, una cantidad de botellas increíbles. Pasó y listo, no pasa nada… Pero te vuelvo a repetir: lo que no puede pasar en este tipo de partidos es que se pare un partido como se paró hoy en el segundo tiempo. Se jugó poquísimo, más allá que dieron 15 minutos. Era para seguir jugando dos horas”, agregó el Jefecito.
Cuando se reinició el partido casi dos horas después de la suspensión, el director técnico gritó que “era el circo más grande que había visto” y lo catalogó como un “papelón” luego de que anularan el gol del empate una hora y veinte después.