A casi tres meses de la muerte de Diego Maradona, su hijo mayor, Diego Junior, habló por primera vez del accionar del médico del astro, Leopoldo Luque, y aseguró que “le da vergüenza” lo que escucha sobre él. Asimismo, aseguró que su padre le tenía confianza plena al doctor, y en la relación no había “amor” sino que estaba en juego mucho dinero.
“Los audios son vergonzosos y repugnantes. Es absurdo, porque mi padre, aunque no parecía públicamente, se preocupaba por su salud”, afirmó el mayor de los herederos del ex entrenador de Gimnasia y Esgrima La Plata, refiriéndose a las escuchas entre Luque y su equipo médico, donde responsabilizaban a su progenitor y el entorno de “no cuidarse”.
Haciendo referencia a la relación de amistad que tenía Pelusa con el neurocirujano, Junior resaltó que “le tenía mucha confianza”, y que la relación no era solo por cariño, sino que “le pegaba mucha plata” para ser atendido, porque el Diez se preocupaba seriamente por su estado de salud. Del mismo modo, sobre el tema señaló: “El defecto más grande de papá era ser demasiado bueno”.
Por último, en dialogo con la periodista Bárbara D’Urso, el hijo de Cristina Sinagra, habló de la falsificación de la firma de su padre, por parte de Luque, en la historia clínica previa al alta por la operación del hematoma subdural, días previos a la muerte. “Todo es grave, pero falsificar la firma en la historia clínica de un paciente es gravísimo. Para todo lo que está pasando está la Justicia, yo no tengo que opinar. Para mí es muy difícil. Pero lo que han hecho, un día lo llorarán ante Dios”, disparó contra el médico, acusado de homicidio culposo.
La imputación contra Leopoldo Luque por homicidio culposo
En la última semana, el neurocirujano que acompañaba a Diego Maradona durante su recuperación por depresión y la operación de un hematoma subdural, Leopoldo Luque, enfrenta actualmente una acusación por homicidio culposo. Es decir que, para la Justicia, el galeno sería uno de los responsables de la muerte del astro el pasado 25 de noviembre.
Al igual que el doctor, que según se supo era el que tomaba las decisiones médicas en la casa de Bella Vista donde residía el ex campeón del mundo, están imputados en la causa la psiquiatra Agustina Cosachov, los dos enfermeros Ricardo Almirón y Gisella Madrid, y el psicólogo Carlos Díaz.
Cabe destacar que, en el grupo de chat que pertenecía al personal de salud que atendía al deportista, Luque dijo que “el gordo se iba a cagar muriendo” si no actuaban rápidamente, y estaban al tanto de los golpes y malestares que sufría el Diez.