Escarnio a la China Suárez: quiénes decidieron defenderla
La actriz ha sido víctima de horribles descalificaciones.

Desde el sábado pasado la polémica entre Wanda Nara, la China Suárez y Mauro Icardi ha copado los medios de comunicación y las redes sociales. Pocas noticias de la farándula argentina ocasionaron tanto revuelo en el último tiempo como esta historia de infidelidad, separación y enfrentamiento.
Mientras la opinión pública defiende mayoritariamente a Nara, la actriz de “Casi Ángeles” ha sido víctima del escarnio popular, insultos y degradación, mientras que Icardi parece quedar casi fuera del juego. Así, frente a las fuertes expresiones de odio hacia la China, muchas mujeres han decidido pronunciarse en su defensa.
Desde una óptica feminista, en las redes sociales comenzó a aparecer la opinión de que Suárez está en la libertad de vincularse, frente al mensaje incriminatorio de Wanda Nara que la acusó de romper una familia, sin poner responsabilidades en Icardi, la persona que tenía el compromiso con ella. De hecho, el propio Benjamín Vicuña, ex de la China, se tomó un momento para defender a la madre de sus hijos frente a tantas descalificaciones mediáticas.
La respuesta de Maglietti
Una de las representantes más visibles de la defensa de Suárez y el cuestionamiento de la actitud de Nara fue la periodista Alejandra Maglietti quien tuvo un cruce con la empresaria a través de Twitter y luego agregó: “La lógica de: es hermosa, a mi marido le gusta, entonces la destruyo por lo que imagino que mi marido haría con ella o la que sea. Como si la culpa fuera de ella y el tipo no tuviera discernimiento. El compromiso es de él“.
La polémica de la China Suárez y Wanda Nara dejó ver una vez el enfrentamiento entre mujeres, como si se tratara de cuentas que tienen que ajustar entre ellas y en la que el hombre queda a un lado. De hecho, muchas mujeres hicieron hincapié en que las designaciones peyorativas que fueron usadas hacia Suárez (como “roba maridos”) no son utilizadas usualmente para los hombres, con lo cual queda al descubierto una lógica sexista.