Siempre que comenzamos una dieta, lo ideal es visitar en primera instancia a un profesional de la salud para saber qué es lo que mejor nos sentara en torno a nuestro objetivos, peso y condiciones físicas. Uno de los métodos más popular desde hace algunos años cuando se trata de bajar de peso es el ayuno intermitente.
Este consiste en períodos en los que no se consume ningún alimento, luego se incorporan y nuevamente se propone una cierta cantidad de horas de ayuno. Esta es una forma muy efectiva para perder peso, pero también debe ser supervisada.
Mariángeles Espiño, especialista en Nutrición y Diabetes, jefa del Servicio de Nutrición del sanatorio Trinidad Quilmes, habló desde el ámbito de la salud sobre este método: “El ayuno intermitente es una herramienta terapéutica para el manejo de algunas patologías, como puede ser la obesidad, la diabetes tipo 2 y las enfermedades cardiovasculares, por ejemplo, que consiste en intercalar periodos de ayuno, que serían momentos de no ingesta de alimentos, con otros momentos de ingesta”.
“De lo que se trata es de generar estos momentos de ayuno para poner en marcha todo un metabolismo de cetosis diferente, que nos va a permitir usar como combustible no la glucosa sino los cuerpos cetónicos, que son originados desde el tejido adiposo, en la búsqueda de quemar calorías de este tejido, y así tratar de buscar el descenso de peso”, agregó la especialista.
También, hizo la salvedad de que esta dieta no es recomendable para todo el mundo, sino que deberían abstenerse las embarazadas, también personas con desórdenes alimenticios, niños y personas con diabetes tipo 1.