El crudo relato de Rubén Wolkowyski, el campeón olímpico que contrajo coronavirus y neumonía

Rubén Wolkowyski fue parte de la selección argentina de básquet que se quedó con la medalla de oro en los Juegos Olímpicos de Atenas, en 2004. Pero hoy sus días están lejos de ser soñados: contrajo coronavirus, lo que derivó en una neumonía y hasta temió por su vida.

El Colo se radicó en Málaga, España, hace un año y medio, donde dio positivo de COVID-19. Su relato es muy crudo: “Tuve casi ocho días con fiebre muy alta, realmente es algo muy fuerte, muy destructivo por dentro. Después tuve una mejoría de la fiebre, pero al noveno día me levantó casi a 40° otra vez y el médico me dijo que el virus me había hecho una neumonía”.

Enseguida detalló cada sensación y cómo vio disminuidos sus sentidos. “El malestar es muy diferente. Al segundo día perdés el olfato y el sabor de la comida, de todo. El dolor del cuerpo es tan fuerte que te deja de cama, la fiebre no te baja, la tos es seca. Es la primera vez en mi vida que tengo miedo. Nunca había tenido miedo a nada, ni de salir a jugar ni de salir a entrenar, pero esto es realmente destructivo. No me dejaron internado, porque la falta de aire que yo tenía no era para estar entubado, sino para estar en casa. Pero si te agarra débil, te lleva para el otro lado. Los especialistas dicen que después de que se te van los síntomas, tu cuerpo formó el anticuerpo y ya no es necesario hacer el test, pero yo lo voy a hacer para quedarme tranquilo y saber que no contagio más”, explicó en diálogo con Radio Mitre.

Claro que le pidió a la gente que esté atenta: “Tienen que tomar conciencia de que este virus es muy destructivo y puede ser mortal. Lo está demostrando en todas partes del mundo. Y no es que ataca solamente a los mayores. Los ataca porque quizás las defensas no son tan fuertes. Pero también va contra los chicos, acá en Europa fallecieron nenes y jóvenes. No sé la cantidad ni el porcentaje, pero están”.

Para cerrar, el primer argentino en fichar por una franquicia de la NBA (Seattle SuperSonics) destacó la solidaridad de sus compañeros de la Generación Dorada. “Casi todos los días hablé con Manu Ginóbili y toda la vida voy a agradecer el apoyo del grupo, como si le hubiera pasado a cualquier otro. Somos 12 que estamos en contacto permanente”, finalizó.