El campeón del mundo que le ganó al cáncer: “Estuve en las puertas del cielo”

Roque Alfaro ha ganado partidos muy importantes: fue dos veces campeón con América de Cali, se hizo con dos torneos locales en la Argentina y con River obtuvo la Copa Libertadores, a Interamericana y la Intercontinental, siendo uno de los pocos campeones del mundo con la institución.

Sin embargo, en los últimos meses se quedó con su victoria más sufrida, esa que más goza hoy en día: venció al cáncer. En diálogo con Olé, reveló cada detalle de su enfermedad y de su recuperación.

El santafesino surgido de Newell”s Old Boys de Rosario nunca tuvo lesiones graves en 18 años de carrera: “Me ayudó haber sido disciplinado. Me detectaron el tumor a tiempo. Empecé con manchas en el estómago y el intestino, había un tumor de dos centímetros en el colon. Después de la trombosis pulmonar, que fue gravísima, empecé a salir”.

“Es duro. Evolucionaba fantásticamente en sala intermedia y empecé a los gritos, porque es como si se te produjeran calambres, no podés aguantar el dolor. Entré a terapia a las diez de la noche y abrí los ojos un par de días después. Todo entubado, pero con vida. Antes de operarme, el doctor les había dicho a mis hijos que rezaran para que estuviera con ellos al día siguiente. De ahí estuve dos meses más en el hospital: entré con 74 kilos y me fui con 57“, reveló el exmediocampista.

Luego pasó a la etapa de combatir día a día: “De agosto a septiembre empezaron las sesiones de rayos, cinco semanas consecutivas, de lunes a viernes. Descansé 15 días y de ahí a quimioterapia otros tres meses. En diciembre me hicieron una endoscopía. El resultado arrojó que el 75% del tumor había desaparecido. El doctor me dijo que no podía creer lo que veía. En febrero me operaron para limpiar a zona rectal y ahora estoy nuevo, me siento recuperado de físico, ánimo y alegría. Estoy muy, pero muy bien. Estuve en las puertas del cielo, Dios no me abrió. Me dijo que no era la hora y me devolvió. La biopsia dio limpita”.

Finalmente, reveló cuál es su situación laboral, dado que la enfermedad lo azotó mientras trabajaba en la Asociación Deportiva de Crespo. “Estoy ahí, pero ahora con un puesto más directivo. Ah, Enzo Francescoli me ofreció ir a Buenos Aires, pero preferí quedarme en Entre Ríos. Enzo siempre está al tanto de todo lo que me pasa, le estoy muy agradecido”.