Juampi González: “Tantos cambios me sirvieron para desarrollar el humor”
El talentoso actor, que lleva adelante el proyecto titulado 'La culpa es de Colón', se destaca tanto en redes sociales como en el teatro. El camino que realizó el artista, comenzando desde Neuquén, pasando por Bolivia, y hasta llegar a Capital Federal.
El invitado de este sábado en ‘Pares de Comedia’, fue Juampi González, humorista de a nueva camada. Fue uno de los primeros en subir sus videos a YouTube y algunos de ellos, tal como bromeó su conductor Luis Rubio, “tienen más visitas que medico de pueblo”. Lo comparan físicamente con el futbolista Girard Piqué, un talentoso del teatro.
Es destacado en sketch, monólogos y personajes, y lleva adelante su proyecto audiovisual llamado “La Culpa es de Colón”. Nacido en la provincia de Mendoza, González se crio Comodoro Rivadavia, luego vivió durante dos años y medio en el país vecino de Bolivia, terminó el colegio -con solo 14 años- en el sur argentino, en Neuquén, y ya de grande llegó a la Capital Federal para estudiar la carrera de Ingeniería.
“Tantos cambios me sirvieron para desarrollar el humor, era mi forma de adaptarme”, comentó el artista y “soltero codiciado”. Pese a su miedo de “sentir que no iba a encajar”, el actor supo superar las adversidades y siempre creyendo en su propia persona y las inquietudes que lo movilizaban permanentemente. “Soy un libro abierto”, aseguró.
González contó cómo fue el momento en el que la destacada y mediática sexóloga, Alessandra Rampolla, participó en uno de sus shows en vivo. Su relación de colegas comenzó porque ella le ‘likeaba’ sus videos, por lo que el humorista le habló “por privado” para agradecerle por mensaje sus reacciones. “Yo la tomaba a ella como inspiración para crear un personaje propio pero no era una crítica ni una burla”, indicó el invitado.
Juampi terminó compartiendo la escena con la especialista en sexo cuando visitó Buenos Aires. Su “consultorio en vivo” fue todo un éxito y muy divertido para los espectadores que estaban un poco tensos y con prejuicios por la temática que, al fin y al cabo, sigue siendo tabú.
