David Card: “Hay bastante incertidumbre sobre las profundidades de la próxima recesión”
El economista y ganador del Premio Nobel 2021 analizó en Periodismo Puro la situación económica global. En diálogo con Jorge Fontevecchia, el profesor de Economía en la Universidad de California se refirió también a los despidos en las empresas tecnológicas.
David Card nació en Canadá en 1956. Se doctoró en Economía en la Universidad de Princeton y en 2021 ganó el premio Nobel de Economía por sus contribuciones empíricas a la economía laboral. El economista sostuvo que “la mayoría de las empresas se recuperaron con mucha fuerza” después de la pandemia, pero estima que la situación global actual puede generar una nueva recesión.
“Hay bastante incertidumbre sobre las profundidades de la próxima recesión, si será tan malo como la gente esperaba hace un año o si se moderará. Hay un par de grandes fuentes de incertidumbre. Uno, por supuesto, es lo que está pasando con la guerra entre Rusia y Ucrania. Otro gran tema tiene que ver con los acuerdos comerciales con China, que tienen un gran impacto en las relaciones mundiales”.
En ese contexto, Card incluye también la reciente crisis en el sector financiero. “Hay otro problema, que surgió en las últimas semanas. Un par de bancos estadounidenses quebraron. Y durante el fin de semana, Credit Suisse, un gran banco suizo, tuvo que ser comprado por otro banco suizo. Así que hay mucha incertidumbre sobre el sistema bancario. Algunas personas se preguntan qué sucederá cuando la Reserva Federal y los bancos centrales europeos relajen un poco su agenda para aumentar las tasas de interés. Eso puede evitar una recesión tan grande como la gente anticipa” afirmó.
El economista se refirió, además, a la situación de las grandes empresas tecnológicas que están despidiendo trabajadores. “Todas esas empresas, creo que ahora nos damos cuenta de que estaban sobrecargadas en los días posteriores de la pandemia de covid, y ahora se están reduciendo un poco. Además, creo que había bastante optimismo, tal vez demasiado, sobre el futuro de algunos tipos de tecnologías que no se han estado entregando tan rápido como la gente espera, por ejemplo, la tecnología asociada a los coches autónomos, que parece estar ralentizada” afirma.