Con sufrimiento, España y Portugal pasaron a octavos de final
Los europeos están en la siguiente fase, no jugaron bien y empataron sus partidos: La Roja, 2-2 frente a Marruecos; los lusos 1-1 ante Irán.
La definición del Grupo B fue para el infarto. Uso del VAR, penales errados, goles sobre la hora. Fue apasionante cómo España y Portugal alcanzaron los octavos de final tras sus sendos empates. En la siguiente fase, La Roja se enfrentará a Rusia y los lusos a Uruguay.
El equipo de Fernando Hierro acabó como líder del grupo tras empatar 2 a 2 ante Marruecos. Fue un partido en el que cometió muchos errores y no pudo imponer su juego de toques cortos; lo intentó, pero los africanos cortaban esas conexiones.
Iban apenas 14 minutos, cuando Andrés Iniesta y Sergio Ramos no se entendieron en la mitad de la cancha. Khalid Boutaïb robó y definió ante un vencido David De Gea para el 1 a 0. Enseguida, España buscó recuperar su estilo y, a base de movilidad, encontró el empate cinco minutos después, con una jugada excelente, en la que el Cerebro llegó hasta el fondo y dejó a Isco solo frente al arco.
En el complemento, los campeones del mundo en 2010 siguieron en la búsqueda de la victoria, pero no hubo caso. Los africanos lastimaban de contra y, a los 80 minutos, tuvieron un tiro de esquina desde la derecha. Cabezazo preciso y violento de Youssef En-Nesyri para poner el 2 a 1 con un golazo. España fue con todo a empatarlo. Iago Aspas lo consiguió, pero el juez Ravshan Irmatov lo anuló por fuera de juego. Desde el VAR le comunicaron que estaba equivocado; dio marcha atrás y convalidó la igualdad para la felicidad española.
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Portugal sufrió, pero pasó
Jugó mal, tuvo poca profundidad y, encima, Cristiano Ronaldo falló un penal.
El equipo de Fernando Santos tuvo un buen rendimiento en los 20 minutos iniciales; luego, mostró falencias en el fondo y poca creatividad en ataque. Irán fue correcto dentro de sus limitaciones; se aglomeró atrás e intentó salir de contra. Cristiano Ronaldo hizo un primer tiempo discreto, pero no fue abastecido, fue más funcional al equipo. Al cierre del primer tiempo, Quaresma arrancó por la derecha, recibió una descarga y, desde el borde del área, le pegó de tres dedos al segundo palo. Golazo. Increíble.
En el complemento, los de Carlos Queiroz salieron un poco más porque necesitaban ganar. Sin embargo, CR7 encaró de izquierda hacia el centro y fue derribado sobre la línea del área. El árbitro Enrique Cáceres no cobró nada, pero desde el VAR le avisaron que revisara la infracción sobre el 7 bravo. La miró y no duró: dio penal. Iban 52 minutos, la acomodó Cristiano, tomó carrera y pateó al palo izquierdo del arquero, pero… ¡Alireza Beiranvand lo tapó! Irán tenía una vida más. A los 93 minutos, hubo penal para los de Medio Oriente. Sí, el empate le daba chances, ya que España estaba perdiendo -luego empató-. Había ingresado Karim Ansarifard y fue él quien se encargó de poner el 1 a 1, con un remate preciso, al techo del arco.
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Con estos resultados, España y Portugal quedaron con cinco puntos cada uno e idéntica diferencia de gol, pero La Roja pasó como primera por más goles a favor (6 contra 5). Irán quedó relegado con cuatro unidades y Marruecos ya estaba eliminado.
