Quita de subsidios en los colectivos por orden de Javier Milei: no funciona el descuento con SUBE para el segundo y tercer viaje
El gobierno libertario realizó cambios en la "Red Sube" con el objetivo de ahorrar más de 13 mil millones de pesos mensuales, desde septiembre hasta fin de año. El móvil de 'Modo Fontevecchia' a cargo de Juan Cruz Soqueira dio todos los detalles desde Constitución.
El reciente cambio en la política de subsidios al transporte público, implementado por el gobierno de Javier Milei, causó un impacto significativo en los ciudadanos que dependen de los colectivos para su movilidad diaria. La medida, que elimina el descuento en el segundo y tercer viaje con la tarjeta “Red SUBE”, generó preocupación y descontento entre los usuarios del sistema de transporte.
Durante la cobertura realizada por el móvil radial de “Modo Fontevecchia” en el barrio de Constitución, el cronista Juan Cruz Soqueira reportó que la decisión gubernamental se traducirá en un ahorro estimado de $13.500.000.000 mensuales para el Estado, desde el mes de septiembre hasta fin de año. Sin embargo, este ahorro tiene un costo evidente para los pasajeros, quienes enfrentarán un incremento en el valor de sus pasajes.
La medida, además de impactar directamente en el bolsillo de los usuarios, tuvo repercusiones en la operatividad del transporte público. La reducción de subsidios llevó a una disminución en la frecuencia de varias líneas de colectivos en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) y la Ciudad de Buenos Aires. Según reporta Soqueira, esta reducción en la frecuencia generó un caos en el sistema de transporte, con largas esperas y vehículos abarrotados.
Los ciudadanos que utilizan el transporte público como parte esencial de su rutina diaria están experimentando un verdadero desafío. El aumento en el costo de los pasajes, combinado con la menor frecuencia de colectivos, exacerbó las dificultades para desplazarse por la ciudad. La situación plantea una preocupación adicional sobre cómo estas medidas afectarán a los sectores más vulnerables de la población, quienes dependen en gran medida de un sistema de transporte público eficiente y accesible.
En resumen, la quita del subsidio al transporte público y la reducción en la frecuencia de los colectivos están generando un panorama complicado para los habitantes de Buenos Aires, reflejando las tensiones entre la política fiscal del nuevo gobierno y las necesidades diarias de los ciudadanos.
